martes, 23 de febrero de 2021

Moricandia arvensis

                                                                                    Alozaina

Carreteras secundarias, autovías, caminos rurales... taludes alterados por el ser humano, terrenos yesosos, margosos o calizos, soleados y secos... es el hábitat del collejón.
Según investigadores de diversas universidades españolas, esta planta presenta un curioso fenómeno genético, la plasticidad fenotípica, que es la capacidad de un genotipo de producir diferentes fenotipos según las condiciones ambientales del momento. Esto se traduce en que la planta, en primavera, produce flores grandes y rosadas, en forma de cruz que atraen a abejas de lengua larga. En verano, con el calor y la aridez, sus flores son más pequeñas, redondeadas y blancas y son polinizadas por una variedad mayor de insectos.

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