Saxifraga reuteriana

                                                                  Torcal de Antequera

Mira que he recorrido veces las extraordinarias piedras del Torcal, rebuscando entre sus recovecos aquellas plantas que allí encuentran su hábitat adecuado y nunca había dado con esta, que en plena floración, es todo un jardín en miniatura.

Esta saxifraga es un endemismo de las Sierras Béticas del centro de Andalucía que florece cuando ya la primavera va perdiendo su nombre a manos del impetuoso verano que con su calor nos recuerda que está a la vuelta de la esquina. La podemos hallar entre las grietas de las verticales paredes calizas, conviviendo con otras plantas de hábitos rupícolas.

Su nombre se lo debemos a Boissier, quien la dio a conocer a la ciencia, dedicándosela al botánico francés George F. Reuter, allá por 1837.

Scilla peruviana

                                        Alfarnatejo - Tajos del Sabar

Ella llegó en un barco de nombre Perú, pero venía de España. Iba para Suecia, a casa de un tal Linneo, padre de la taxonomía moderna, y el hombre debió liarse de tal manera que nombró a esta planta como Scilla peruviana, marcando así erróneamente el origen de esta hierba en un lugar allende los mares, cuando lo tenía más cerca, en el suroeste europeo y el noroeste africano.

El jacinto estrellado brota de un bulbo. Sus hojas verdes aparecerán con las primeras lluvias otoñales y sus flores mediada la primavera: una corona de estrellas lilas que irán abriendo progresivamente desde los bordes hacia el centro.

La flor de la corona aparece en suelos húmedos, en pastizales al sol, aunque también en suelos más secos a la sombra de otros árboles. Al comenzar el verano, se irá marchitando, guardando bajo tierra en la seca y ardiente canícula el secreto de esta bella flor.

Centaurea clementei

               Cuevas de San Marcos - Sª del Camorro

Parece una mata de alcachofa fuera de lugar, mucho más pálida, con las hojas plateadas, casi blancas, colgada de los paredones calizos, en lugares inaccesibles a posibles depredadores.

Descubierta para la ciencia por Boissier en su viaje por la Serranía de Ronda en el s. XIX, le dedicó la especie al botánico valenciano Simón de Rojas Clemente, de ahí su nombre.

Planta endémica de las Sierras Béticas Occidentales y de puntos del norte de Marruecos, escasa aunque no difícil de localizar, podemos ver abrir sus flores crema o amarillo pálido durante los meses de mayo y junio, dando así a esta centaurea un mayor atractivo si cabe.

Armeria grajoana

                                                 Sª de Alcaparaín

Como en la vida misma, en los pequeños detalles está la diferencia, esos que solo los botánicos entienden y que hacen de esta planta una especie única y especial.

Esta armeria no es solo un endemismo exclusivo de nuestra provincia, sino que se encuentra restringida a un solo enclave entre las rocas y tajos calizos del Pico del Grajo, en la Sª de Alcaparaín, de ahí su nombre científico. El número de ejemplares es escaso y se encuentra catalogada como una especie en peligro de extinción, por lo que sería necesario tomar medidas que garantizaran su futuro a medio y largo plazo.

Pero ella, ajena a declaraciones y documentos oficiales, a leyes y disposiciones, al llegar el mes de mayo, sigue mostrando a quien por allí se acerque sus escapos de flores rosas sobre largos y finos tallos que cimbrean y acompasan al son constante del viento en las cumbres.

A Luci, una flor única para una mujer única.

Limodorum abortivum

                                   La Albuqueria - Coín

Como en toda comunidad que se precie, ya sea humana, animal o vegetal, siempre hay alguno/a que aprovechando el trabajo de otro/a, logra hacerse un hueco en la vida, y esa es nuestra orquídea abortiva.

El limodoro carece de clorofila, y con la ayuda de hongos, logra sacar provecho de otros vegetales, obteniendo los azúcares que estos últimos fabrican a través del proceso de la fotosíntesis.

Esta planta parásita, de un intenso color lila, habita los sotobosques de frondosas y coníferas, en todo tipo de suelos pero siempre en sustratos ricos en materia orgánica, allí donde hay una buena capa de hojas o acículas muertas. Sus flores abrirán durante los meses de abril y mayo, autopolinizándose en la mayor parte de los casos y dando lugar a frutos cargados de diminutas semillas -hasta 16.000 en una sola cápsula.

Se distribuye por toda la zona mediterránea, llegando hasta el Cáucaso.

Como curiosidad, el apelativo abortivum del efecto que su consumo pueda causar en mujeres embarazadas, sino de que "aborta" sus hojas cuando va desarrollándose, quedando estas en unas pequeñas escamas.

Finalmente señalar que para distinguirla se otra especie similar también presente en nuestros bosques, el limodorum trabutianum, basta con mirar su espolón, muy corto en esta última en comparación con el de la orquídea hambrienta.

Rhodanthemum arundanum

                                        Sierra de las Nieves

Encontrar esta pequeña margarita no es tarea fácil. La última vez que la vimos fue hace una década. Ayer de nuevo pudimos disfrutar con sus menudas florecillas rosas pegadas a una mata que apenas levanta unos centímetros del suelo rocoso, en grietas o en los pequeños espacios de tierra que quedan entre las piedras.

Esta planta, un endemismo bético-magrebí, es uno de los tesoros botánicos de la Sª de las Nieves. Aparte de aquí, en la Península solo la veremos en Sª Mágina, Sª de Cazorla y Sª de Aitana. Se encuentra catalogada en peligro crítico y sus poblaciones están en franca recesión, habiendo desaparecido de algunos lugares en los que eran habituales, ya que padece bastante con los largos períodos de sequía a los que, desgraciadamente, parece que nos dirigimos cada vez con más frecuencia.

Drosophyllum lusitanicum

                                        El Colmenar - Estación de Gaucín

Dentro del mundo singular de las plantas carnívoras, esta atrapamoscas es especialmente rara, diferente, una singularidad extraña y poco conocida - no son muchas las personas que saben de su presencia en la sierras del oeste de Málaga, en la zona del Estrecho de Gibraltar, algunos puntos de Cáceres y en el norte de Marruecos-.

Al contrario que la mayoría de este tipo de plantas que buscan terrenos húmedos, encharcados, saturados de agua donde desarrollarse, el drosophyllum crece en terrenos secos y soleados, muy escasos en nutrientes, en zonas quemadas por el fuego, bordes de caminos, carreteras o en los cortafuegos, donde la competencia es escasa. Allí desenrolla sus hojas cubiertas de glándulas pegajosas y azucaradas que atraen a los insectos y los dejan literalmente pegados. Unas enzimas que segrega irán deshaciendo a los incautos golosos, aportando así los nutrientes que del árido suelo de la herriza no puede sacar.

Y por si esto fuera poco, durante el mes de mayo nos sorprenderá con unas flores grandes, de un amarillo intenso, que no pasarán desapercibidas ni para nosotros ni para sus polinizadores, especies distintas a las de sus potenciales presas, para lo cual la flor emite aromas diferentes a los de las hojas.

Una planta única que en nada se parece a aquellas carnívoras devoradoras de hombres de los dibujos de nuestra infancia.

                                                        La Sauceda

Ornithogalum reverchonii

                                                     Montejaque

Como si quisiera huir de la mano del hombre o de los más probables dientes de cabras y ovejas, esta planta se encarama en los más escarpados tajos, en las grietas y oquedades, y allí deja crecer sus hojas acintadas que caen pared abajo y en primavera, su vara de flores blancas, enhiesta, buscando la luz que anhela a la sombra de altos paredones calizos.

Este ornithogalum es una planta particular, con una estenocoria bastante acusada ya que solo está presente en algunas zonas de la serranía de Ronda y sierras de Cádiz, y de forma muy puntual en la Sierra de las Villas en Jaén y en el norte de Marruecos.

Como curiosidad, las plantas de estos dos últimos lugares, en vez de vivir colgadas en los escarpes calizos, lo hacen en terrenos sin apenas pendiente, en la arcilla que queda entre las rocas. ¡Será que allí los rumiantes tendrán manjares más exquisitos que llevarse a la boca!

Allium roseum

                                  Cuevas de San Marcos

Mediada la primavera, entre la hierba, al borde de caminos, en campos de cultivo abandonados o bajo los árboles y entre las rocas aparecerán los capítulos del llamativo ajo rosado.

En el extremo de un largo tallo y cimbreados por la más leve brisa, una multitud de pequeñas flores de un rosa más o menos intenso abrirán casi a la vez, ofreciendo su atractivo a paseantes e insectos.

El ajo de culebra lo encontramos distribuido por todo el Mediterráneo. En la Península se encuentra en casi todas las provincias, exceptuando en cuadrante noroccidental.

Sus bulbos y flores son comestibles, aportando el mismo sabor y cualidades que el ajo cultivado: hipotensor, anticoagulante y excelente ayuda para el control del colesterol LDL, lo que vulgarmente conocemos como colesterol malo.

Reseda barrelieri

                                                  Sª de Mijas

Sin ningún género de dudas es esta la reseda más llamativa de todas por su alto tallo floral que puede alcanzar hasta metro y medio de altura, pero sobre todo por la extraña morfología y disposición de sus flores a lo largo de esta vara que busca el cielo.

El hopo de zorra forma parte de las hierbas bianuales que tras un proceso de maduración de dos años - el primero forma la roseta de hojas pegadas al suelo y en el segundo florece y fructifica - terminará secándose y esparciendo sus semillas de futuros ejemplares.

Este endemismo ibérico es propio de terrenos calizos, margosos o yesosos, aunque en Málaga lo encontraremos principalmente en las arenas procedentes de la descomposición de los mármoles sacaroideos.

 

Ophrys speculum

                                      Sª Canucha - Monda

Me sorprendió la primera vez que la vi y no deja de sorprenderme año tras año.

Esta orquídea pequeñita, presente en todo el Mediterráneo Occidental, tiene una de las formas más sugerentes entre las orquídeas ibéricas. De color oscuro pero con el labelo coloreado de un intenso azul violáceo brillante y perlado, rodeado de multitud de pelillos pardo-rojizos, logra vestirse de insecto y engañar a los machos bobos de una especie de abejorro que intenta una vez y otra copular con ella, sin éxito para él pero con premio para la abejera del espejo, que dejará en el lomo del insecto sus sacos polínicos, habiendo compensado de ese modo el esfuerzo y el gasto que supuso abrir sus flores.

Y hasta el próximo año, en el que al comenzar la primavera, volveremos a buscarla para verla, fotografiarla y decir "la primera speculum de esta temporada".